Simulacro de incendio

|
Es verdad,
nuestros pijamas
no son nada sexies,
están deshilachados,
tienen agujeros
y los elásticos flojos.

El mío es de Francia 98
con el gallito del mundial,
vos tenés uno de Mickey,
todo desteñido
que me encanta.

Te miro de reojo,
un cameo rápido
mientras te cambiás
y pienso en sacar pasaje,
armar las valijas
e irme a vivir
a uno de los lunares
de tu espalda.

Simulacro de incendio
enredados
entre tus sábanas,
después arden las llamas
y el detector de humo
que chilla como loco.

Doble carne, doble beso
y a bailar desnudos
sobre las brasas
de la cama
como faquires del amor.

¡Fuego, fuego!

Los bomberos
derriban las puertas,
los vecinos
evacúan sus casas,
el techo
se cae a pedazos
y nosotros
nos reímos
a carcajadas
como cada noche
con la cajita de fósforos
escondida debajo del colchón.

Nicolás Igarzábal

1 caracoles:

Anónimo dijo...

bien! (y gracias)

Publicar un comentario