Puré de Pappo

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28 pesos, me acuerdo perfecto.

Eso salía Pappo & amigos en el Musimundo de Hidalgo y Rivadavia, donde ahora está el Village Cine.

Era el año 2000, ese famoso año donde iba a pasar de todo y no pasó nada.

Yo todavía no había cumplido los 15 años y sabía tan poco de música como de sexo.

Pero fue uno de los primeros discos que compré por mi cuenta, a conciencia. Es más, creo que lo compré más por sus invitados que por Pappo en sí. Estaban La Renga, Los Piojos, Viejas Locas, Divididos. A esos ya los tenía incorporados (y graffiteados en mis carpetas). A Pappo, no tanto.

Le saqué bastante el jugo al disco. Mi vieja se había emocionado (y sorprendido) con mi compra, y me contaba que de chica estuvo toda una tarde sacando el riff de "Sucio y desprolijo", que no sabía dónde quedaron, después de tantas mudanzas, pero que había tenido varios Pappo's Bluses en su casa. Yo todavía no diferenciaba entre Pappo's Blues, Aeroblus o Riff. Era simplemente Pappo tocando con todos mis ídolos del barrio, en una especie de orgía musical.

Hasta que un amigo me ofreció cambiarme mi Pappo & Amigos por su Anthology de los Ramones. Se lo había traído la vieja de USA (últimos resabios del 1 a 1). Era doble, con cajita, tenía librito en ingles. Una facha bárbara. Económicamente, yo salía ganando. No valía menos de 50 pesos ese pack. Musicalmente, salía perdiendo. Pero no lo sabía. El pibe estaba de vuelta del punk, ya estaba podrido (hasta había tenido una banda de covers flemeros llamada Mukiakos, con la que había tocado en La Colorada). Acepté, hicimos el trueque y de los Ramones pasé a Sex Pistols, The Clash, Stooges, Television, Buzzcocks, Misfits y una larga lista de etcéras que se sigue actualizando hasta hoy. Adiós Pappo's Blues, bienvenido punk rock, dije. Y me interné en la Bond Street.

Fueron unos cuantos años de tachas y parches. A Pappo le perdí el rastro. Lo volví a cruzar en el Quilmes Rock 2003, de casualidad, en una grilla con Attaque 77, Die Toten Hosen, Kapanga y Massacre. Al día de hoy, todavía no sé qué hacía ahí metido en ese line up. Tocó temas de un álbum nuevo (Buscando un amor) que a mí me parecieron iguales a los anteriores.

Hoy lo pongo cada tanto, muchos años y birras después, y me parece un discazo. En este 2011 me siento más cerca de Pappo que de los Ramones.

Pappo y los Ramones están muertos. Musimundo también (lo compró Megatone). Escucho los 7 versículos al hilo, la pasión según Pappo's Blues, y voy encontrando la semilla de todas las bandas que vinieron después. Ahora lo entiendo todo:

Gato de la calle negra = La Renga (¿será por ese riff que suena tan parecido a "Hey hey, my my"?)

Hansen = Divididos (¿Cómo puede ser que Hansen no esté en Pappo y Amigos? La puta madre, ni siquiera existe una version en vivo en You Tube)

Abelardo el pollo = V8 (proto metal)

Siempre es lo mismo nena = Viejas Locas (imaginarlas cantadas por Pity, quedan genial)

Insoluble = Intoxicados (ídem la anterior)

Especies = Natas (el primer tema stoner del rock argentino)

Y así podría estar toda la noche, buscando parecidos imposibles de comprobar científicamente.

Hoy Pappo hubiera cumplido 61 años. No estará él, pero queda la otra mitad del título: los Amigos. Los suyos, los míos.

En Mercado Libre hay un pibe que ofrece el CD de Aeroblus. Se lo voy a cambiar por mi London Calling.

Negoción.

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